Un ángulo de acero es considerado un perfil comercial, debido a que se le considera flexible en cuanto a su estructura y es muy resistente gracias al diseño en forma de L que tiene. Este mismo diseño puede ser modificado a petición del cliente para que sean perfiles disparejos lo que conformen este producto o en su defecto, sean proporcionales ambos lados.

El ángulo de acero comercial puede formar parte de diversas estructuras metálicas ligeras o de mayor peso, dependiendo el uso que se le quiera dar. Es ideal como soporte para bajos requerimientos técnicos, mientras para asuntos más exigentes se aumenta la cantidad de ángulos que se utilizan, así como se les coloca en puntos específicos para dar un refuerzo ideal.

Este perfil de acero es fabricado con un proceso de laminado en caliente, en donde el acero al carbón que lo conforma se divide en múltiples partes, algunas de ellas indicadas para crear este producto. Se le da la forma mediante una máquina que permite hacer los dobleces característicos del ángulo comercial para que tome su forma final.